Yo si que estuve en el homenaje que la Junta de Hermandades de Semana Santa de la Diócesis de Valencia tributó a Vicente Esteve en Betania

(Por José Ángel Crespo Flor)

La verdad es que aunque nunca hubiese querido ser noticia ni un periodista ha de buscar serlo serlo ( la noticia siempre está en el entrevistado nunca en el entrevistador), ayer domingo, (IV domingo de Adviento), estuve en la Residencia Sacerdotal de Betania en el homenaje que la Junta Diocesana de la Semana Santa de la Diócesis de Valencia ofreció a Vicente Esteve Belenguer que, no lo olvidemos, durante su etapa en la parroquia Nuestra Señora del Rosario fue, en varias ocasiones, prior de la Semana Santa Marinera de Valencia (SSMV). Así que acudimos a la llamada de Juan Miguel Lloret Miñana, Presidente de la Junta de Hermandades de Semana Santa de la Diócesis de Valencia aunque la verdad sea dicha nos enteramos por Begoña Sorolla, presidenta de la Semana Santa Marinera de Valencia (SSMV) en la Junta Parroquial del Rosario a la que habitualmente suele asistir.

Si les digo que el único representante de una Hermandad de la Semana Santa Marinera era quien firma esta crónica, comentario u opinión no digo ninguna mentira. Y los que allí estuvieron lo saben. Igual que lo sabe Vicente Esteve, Antonio Diaz Tortajada, José Antonio Varela, actual párroco de La Asunción de Benimaclet y José Jaime Brosel, recién llegado de Roma para pasar estos días de Navidad con su familia. Así que, en dicho acto la única hermandad representada de todas los que componen la Semana Santa Marinera fue la Hermandad del Cristo de los Afligidos a través de quien firma esta opinión. Y me da igual que luego sea en algún foro, el centro de la conversación porque la verdad tiene un solo camino y ese camino es que la Semana Santa Marinera como tal estuvo representada en el citado homenaje por una Hermandad y por una persona. Y como sacerdotes los anteriormente mencionados, ni uno más ni uno menos.

El acto fue sencillo y entrañable. La organización, por lo tanto, merece un diez pero a mi, particularmente me quedó un mal sabor de boca al comprobar que era el único integrante de la Semana Santa Marinera presente en dicho homenaje cuando Vicente se ha desvivido por la Semana Santa Marinera a la que acostumbraba a decir "mi Semana Santa Marinera". Como sacerdote, aunque este haciendo, en la Residencia Sacerdotal de Betania, las funciones propias de consiliario de la Junta de Hermandades de Semana santa de la Diócesis de Valencia se encontraba Antonio Díaz Tortajada que es también consiliario de las hermandades y cofradías de su parroquia Santa María del Mar, quien, no obstante, señaló que "hubiese hecho lo imposible por estar presente en un acto que partió de la religiosidad popular y en concreto de las Cofradías y Hermandades de la Diócesis de Valencia. Y hubiese hecho lo imposible por estar porque han sido muchos años los que he pasado con Vicente en el Seminario, soñando con ser lo que somos, sacerdotes, después en la parroquia de san Maximiliano Maria Kolbe, muy cerca de su casa, en el centro de Benimaclet popr lo que conozco bien a toda su familia y luego, mucho tiempo trabajando en el mismo arciprestazgo de san Pío X, yo en Los Ángeles y Vicente en El Rosario, lo que ha hecho que se estableciese entre Vicente y yo una relación fluida, personal y sincera".

Insisto, todo estuvo muy bonito, todo se realizó con mucha sencillez y sinceridad pero a mí particularmente me quedó una espìna clavada: ¿cómo podemos ser las personas tan descuidadas con quien ha sido nuestro consiliario y prior?. Y un último apunte ¿todo el mundo tenía tanta faena a las 17 horas que no pudieron desplazarse hasta Quart de Poblet -en el metro en media hora estás allí- para estar presente en un acto que, organizado por la Junta de Hermandades de Semana Santa de la Diócesis de Valencia, trataba de homenajear a un sacerdote enfermo?. Y no me valen excusas porque quien quiso estuvo. Y Vicente se dio cuenta de los que estuvimos y de los que no estuvieron. Un detalle lo viene a constatar, al verme y antes incluso de preguntar por los de casa Vicente me habló del Cristo de los Afligidos y de la Hermandad y me animó, tras la derrota del Levante frente al Athletic de Bilbao, "porque queda mucha liga, la plantilla está muy unida y se están haciendo las cosas muy bien. Yo tengo mucha seguridad en que se van a salvar aunque vamos a sufrir mucho".

Si han leído hasta aquí. Se lo agradezco. Ahora, cierren sus ojos, piensen, mediten y vean donde tenían que haber estado un domingo a las 17 horas, sin colegio, con los belenes montados y sin que Valencia o Levante jugasen en Mestalla o en el Ciutat de Valencia. Yo sí que tengo claro donde tenía que estar y donde estuve. Otros a lo mejor no lo tenían tan claro ... ¿o si?. Allá - me refiero ahora a los que no acudieron- con sus conciencias. La mía, por lo apuntado antes, está y siempre ha estado muy tranquila.