(Desde El Cañamelar J. A. C. )
El vaticanista Andrea Tornielli recuerda en su blog que ayer domingo 8 de agosto y fiesta de santo Domingo de Guzmán, se cumplen cien años del decreto Quam singulari amor Christus, con el que en 1910 Pío X redujo la edad de siete años para recibir la eucaristía.
Y comoquiera que San Pío X es quien da nombre a todo este arciprestazgo donde se encuentra, entre otras, la parroquia Nuestra Señora del Rosario a la que pertenezco como feligrés, deseo hacer mías las palabras de este experto en 'asuntos vaticanistas' como es Andrea Tonielli y plasmarlas en este blog pues entiendo que así se da importancia a un personaje, San Pío X, que llegó a la Santidad porque supo cumplir en todo momento lo que la Iglesia le fue demandando. Pero ... les dejo con las atinadas palabras de este vaticanista. Que ellas nos sirvan para adentrarnos un poco más en el magisterio de este gran Papa que, desde el Vaticano supo cómo llegar a la Santidad.
El papa Pío explicó que no era necesario conocer todo el catecismo, ya era suficiente sólo para cumplir la edad de "discreción", para distinguir este particular, no era común el pan sino el cuerpo de Cristo. Esta fue una de las numerosas reformas que han caracterizado al papa Pío X, proclamado santo. Hasta entonces, se podía recibir por primera vez la eucaristía a la edad de doce años.
Hoy en la sociedad secular y descristianizada cada vez más, la Iglesia tiende a prolongar el tiempo de nuevo y utiliza siempre la mayor preparación para la primera comunión como una oportunidad de volver a contactar o ponerse en contacto por primera vez las familias de los comulgantes, tratando de que participen en la preparación del sacramento. Comprendo muy bien estas razones. Al mismo tiempo, también veo el lado negativo y creo que lo que la gracia puede trabajar a través de la admisión de los niños a la eucaristía de acuerdo con las instrucciones de Pío X.
Tal vez sería un error de diferentes maneras y permita que los niños pronto vengan a la iglesia regularmente desde chicos, y su familia, de la que han absorbido un puñado de catecismo en primer lugar. Pero continuó para diluir el momento a discreción de los sacerdotes de la parroquia, para los niños que no saben nada del cristianismo.
Actualización: ayer (7 de agosto), el cardenal Antonio Cañizares Llovera, prefecto de culto, publicó un artículo que recuerda el centenario del decreto del papa santo, por escrito; entre otras cosas: "El centenario del decreto Quam singulari es una ocasión providencial para recordar e insistir en tomar la primera comunión cuando los niños tengan suficiente uso de razón, que aún hoy parece haberse anticipado. Por lo tanto, en la práctica se está introduciendo cada vez más aumentar la edad de la primera comunión. Por el contrario, sigue siendo más de anticipar. Frente a lo que está pasando con los niños y así contra el medio ambiente en que crecen, es la garantía de su crecimiento como hijos de Dios, generados por los sacramentos de la iniciación cristiana en la Santa Madre Iglesia. La gracia del don de Dios es más poderosa que nuestras obras y nuestros planes y programas".
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